Homenaje

Cuando la pasión me tenia absolutamente desbordada, mi celular daba cuenta de tu llamado, tu siempre tu, el incondicional, el que no pide nada, como siempre sabes cuando algo me pasa, que te une tanto a mí, que por largos 20 años siempre que mi corazón se agita, tu simplemente llamas e inundas mi tormenta de calma.

No te había mencionado antes, eres por siempre mi fiel compañero, mi primer amor, talvez el único que durante años me ha amado en el más absoluto silencio y anonimato, quien jamás ha cuestionado mi vida, dispuesto siempre a darme la mano cuando el dolor me agobia, a espantar mis miedos y por cierto a amarme con la pasión de los que saben, aquellos que no van por la vida jactándose de conquistadores, tu mas que yo tempranamente entendiste que nunca partiríamos el uno del otro.

Gracias por tus silencios, por todas y cada uno de tus presencias, por estar siempre a mi lado y nunca jamás haber juzgado, gracias por tu ternura, por tus sabios y atinados consejos, por dejarme ser y crecer lejos de ti y aun así no dejarme partir, gracias muy especiales por entender y perdonar mi cobardía. Por dedicarme tus aciertos cuando sucumbían en la galería, por tus penas compartidas, por escuchar siempre las mías, gracias por todo y tanto.

Este es mi homenaje, a ti, mi gran hombre, un homenaje a tu capacidad de amarme por sobre todo y todos, a tu entrega y especialmente a la gracia de encadenarte a mi vida.